Si estás buscando la fórmula mágica para ganar un torneo de billar, siento decirte que no existe. O sí, pero solo la tiene Shane Van Boening, y me temo que difícilmente la compartirá con el resto de billaristas mortales. Lo que sí puedo darte hoy son algunos truquillos que te ayudarán a competir mejor. O al menos, a entender qué significa competir y porqué unos lo hacen tan bien. ¿Preparado? ¡A por ello!
Todos jugamos para ganar, pero ganan muy pocos. Ganan solo los mejores: los que se han preparado a consciencia, los que entrenan siempre con un objetivo en mente, los que siguen una rutina, los que van a competir y no a jugar, los que no dan nunca el partido por perdido, los que no se conforman con llegar a la final, los que están dispuestos a sacrificarse al máximo para ganar.
- ¿Te has preparado a consciencia?
- ¿Entrenas con un objetivo?
- ¿Sigues una rutina de juego?
- ¿Vas a competir?
- ¿Nunca das el partido por perdido?
- ¿No te conformas con llegar a la final?
- ¿Estás dispuesto a sacrificarte al máximo para ganar?
Si quieres ganar, la respuesta a todas estas preguntas debe ser un rotundo sí.
Te puede interesar: 7 malas costumbres del billarista
Confiar y creer que ganarás
No es una cuestión de fe, es una cuestión de ley de atracción. Las cosas que piensas son las cosas que atraes. Si piensas que hoy también perderás, es muy probable que hoy también pierdas. Si confías y crees que hoy, o algún día, ganarás, eso tarde o temprano se cumplirá.
Para ganar debes ser ambicioso, deshacerte de límites (tuyos y ajenos) y pensar en grande.
Expectativas
La gran dificultad es que pensar en grande y tener demasiadas expectativas a menudo van de la mano, y eso te puede perjudicar:
- Demasiadas expectativas = riesgo muy alto de decepción
- Escasas expectativas = riesgo muy alto de jugar por jugar
- Justas expectativas = riesgo muy alto de disfrutar al máximo del juego (o sea, bueno)
La mayoría de veces que he ganado un torneo de billar no esperaba que lo iba a ganar. Era consciente de mis posibilidades, pero sin elevar demasiado mis expectativas hacia la victoria.
Lectura recomendada: Top ejercicios de billar para entrenar
¿Ganar como objetivo?
La próxima vez que te pregunten cuál es tu objetivo para este torneo que va a empezar. Piensa 10 segundos antes de responder “ganar”.
Ganar no debe ser el objetivo por una simple razón: en general (a no ser que seas un super billarista) ganar no es lo normal. Es lo extraordinario. Por eso, si de entrada te marcas un objetivo que se cumple muy pocas veces, te sentirás frustrado por ver como fracasas cada vez en el intento de alcanzarlo.
Un buen objetivo puede ser:
- Ser fiel a mi estilo y a mi rutina de juego
- Disfrutar y luchar cada partido hasta el final
- Mantener la mente positiva aunque no me rueden las bolas
Fíjate que no hace falta ganar para cumplir esos tres objetivos.
Para los campeones, ganar es la consecuencia de cumplir todos esos pequeños mini objetivos. Es la recompensa al trabajo bien hecho, a la perseverancia y a la constancia.
No hay fórmula mágica fácil para ganar, pero es muy probable que lo acabes logrando si trabajas y perseveras.
¡A por ello!